EVA AL DESNUDO

DE

JOSEPH L. MANKIEWICZ

 

 

 

 

 

 

 

  ENVIARME VUESTROS COMENTARIOS

 foxyform

¿Quién se conoce verdaderamente a sí mismo? Podemos llegar, como mucho, a vislumbrar ciertas inclinaciones de nuestro carácter, a encajar algunas críticas que nos dirigen nuestros semejantes, a seguir los pasos de aquellos a los que queremos imitar y que supuestamente conducen a alcanzar el bien más preciado, la felicidad. La pronta consecución de ésta nos ayuda a alcanzar metas inmediatas, a menudo inmorales, buscando así el atajo envenenado. Y el resto de nuestro proceder permanece oscuro. Actuamos sin saber por qué. Empujamos la piedra y juzgamos a los demás con la severidad de férreos jueces y nos aplicamos la máxima indulgencia cuando somos nosotros los que perpetramos las mismas faltas. Y sin embargo, seguimos viviendo y debemos aplacar nuestra conciencia, ante ese tribunal perpetuo que siempre está reunido... En la penumbra de nuestra frágil conciencia avanzamos buscando un poco más de luz que nos alumbre el camino. Aquellos que saben algo más de sí mismos –aunque solo accedan a conocer sus proclividades más inmorales- lo tienen un poco más fácil para alcanzar sus objetivos, pero la seguridad de que tales metas serán alcanzadas quedan fuera de nuestra voluntad. Y pese a tanta incertidumbre, en el teatro del mundo todos estamos condenados a adoptar nuestro papel: Portamos la máscara e interpretamos el drama de la condición humana. Y es precisamente el actor, aquel que puede ser todos los hombres, el que mejor representa la tragedia humana del desconocimiento: Ha de dar sentido al personaje y darse sentido a sí mismo como persona. La humanidad que constituyen los actores es el marco en el que se expone esta pesimista visión del ser humano. En este triste panorama parece que el amor y la buena voluntad son las únicas vías para superarlo. La sociedad, en tales condiciones, está regida por el engaño, la doblez y la instrumentalización de nuestros semejantes, por lo que al final, la infelicidad impera. La perspectiva de sátira social se impone en esta película y no solo retrata a Eva, la primera mujer, sino a todos esos extraños seres que la rodean y que somos nosotros mismos.


Hay un fenómeno que se repite una y otra vez en el cine, y supongo que en todos los campos de la interpretación, que es que cuando las actrices cumplen los cincuenta años, un elevado porcentaje desaparecen. No siempre, claro, muchas se mantienen, pero son las menos. Y no creo que la culpa de esto la tengan los productores o el público, sino el brutal paso del tiempo, que no perdona. El estrellato, la fama y la gloria se reducen a un ciclo que se renueva una y otra vez bajo la sinfonía macabra del paso del tiempo. De esto y mucho más se habla en "Eva al desnudo". No es un homenaje al teatro, el mundillo teatral es sólo un mero escenario, va infinitamente más allá. Habla de los sueños que una vez cumplidos ya no son sueños, sino mera propiedad, aquí en forma de galardón, que no significa nada. Pero que para alguien lo significa todo, alguien que desea exactamente ese galardón. Pero, qué cosas, cuando la persona que posee el galardón se da cuenta de que otra lo quiere, saltan chispas. Y no sólo habla de esto....Me podría pasar escribiendo horas y horas, y creo que jamás terminaría de contar de todo lo que representa "Eva al desnudo", por eso, lo dejo en que se habla sobre la vida....decir otra cosa es quedarse corto. Y para llevarnos por esta historia, la película se sirve de uno de los guiones más asombrosos, inmejorables y perfectos que yo he visto en una película. Es un prodigio de sugerencia y explicitud, según convenga, y si se explicita, es en forma de diálogos ingeniosos, y a la vez naturales; diálogos que desgranan a los personajes, que nos los describen, que los hacen perfectamente creíbles y humanos. Si a todo esto, le añadimos toda la galería de personajes que desfilan por el film no sólo están perfectamente escritos, sino que también están encarnados por interpretaciones irrepetibles... y por encima de todo, una Bette Davis, maravillosa, con una mirada que acuchilla, grandiosa, de fuerza descomunal; dando la mano a un George Sanders genial, el cinismo y la ironía adquieren arte cuando salen de su boca; después Anne Baxter y Celeste Holm, profundas... haciendo grandes creaciones. EVA AL DESNUDO contiene todos y cada uno de sus aspectos externos e internos funcionando a la perfección. Esta película es un autentico milagro, un placer inconmensurable, al que se puede volver una y otra vez porque siempre parece nueva, un despliegue de ingenio y sabiduría. Y aunque de entre todos los temas que toca, uno de ellos sea el inquebrantable paso del tiempo, esta película ya ha alcanzado la inmortalidad..

!!! SOBERBIA !!!..

 

Es puro teatro. Lo digo sin ánimo peyorativo. Mankiewicz curiosea en los camerinos de Broadway para preparar, a través de “Eva al desnudo”, una auténtica ‘master class’ de esgrima dialéctica. Un productor, un director, un dramaturgo, un crítico, las esposas de unos, las señoritas de compañía de otros y, como no, una ambiciosa aspirante a primera actriz y una veterana estrella en horas bajas, emplearán sus lenguas como afilados estiletes para defender sus intereses en un intenso drama con el universo teatral como telón de fondo. Mankiewicz se vale de dos de las armas más mortíferas del género: un portentoso argumento y unas interpretaciones sencillamente excepcionales. Sin embargo, me gustaría reiterar la extraordinaria calidad de los diálogos porque son estos los que atornillan a la butaca al espectador, ante un apabullante despliegue de locuacidad que convertiría cualquiera de nuestros debates domésticos en una vulgar charla. Pero más que esa impresionante capacidad oratoria lo que realmente me dejó embelesado y fascinado al mismo tiempo fue constatar la poderosa e impecable capacidad del lenguaje para destilar conceptos tan variopintos como manipulación, seducción, adulación, disimulo, cinismo, sarcasmo, ironía, desdén, vergüenza, temor, orgullo, amenaza, fraude o artificio por citar tan solo algunas de las células congénitas que componen “Eva al desnudo” y que la hacen grande, muy grande. Tan grande como Bette Davis, que en este film ratifica una vez más su incombustible talento. Está demostrado. A los mejores actores/actrices, si además van cargados de ambición y falta de escrúpulos, no les basta con los escenarios o las cámaras para desplegar su talento interpretativo. Necesitan extender la actuación al plano real para que la obra que es su vida de farándula les salga redonda. La película es una historia típica sobre trepadores de lengua bífida e insidiosa. Parásitos y depredadores con piel de oveja que se meten en el bolsillo de los incautos a golpe de modestia fingida, de circunstancias, de compasión que se despierta con ojos de corderillo, de adulación sabiamente dosificada. Y, como artífice de todas esas tretas, un cerebro brillante y calculador hasta el escalofrío. La fama es un perfume extasiante con efectos narcóticos, es la luna que muchos sueñan con alcanzar. Algunos estarán dispuestos a todo para conquistarla, y no repararán en medios ni en engaños.

 

Espectacular actuación de Bette Davis, para mi la mejor de su carrera... ¿Qué tenía esa mujer, que era capaz de merendarse la cámara, la pantalla, y el escenario, y tomar un diálogo y conseguir que en sus labios sonara todo sublime? ¿Qué especie de feroz atractivo felino rezumaba, que sin ser bella anulaba cualquier belleza? Quizás fuera el fulgor de unos ojos inteligentes, irónicos y fogosos o el vigor de sus interpretaciones. Cualquier director que se preciara estaría enamorado de semejante talento, de esa sacudida sísmica en la pantalla, con aroma de femineidad. El film tiene diálogos para el recuerdo, perla tras perla pronunciadas en tal profusión que el oído no puede asimilar tamaña sucesión de frases imperecederas. Amargura, ironía, hipocresía, sinceridad, humor mordiente y refrescante, pensamientos introspectivos expresados en voz alta... Guión que supera con creces la excelencia. Como amante del cine mi admiración total a todos los intérpretes, pero, como ya he declarado, a mi querida Bette y, siguiéndola de cerca, a Gary Merril, un compañero de altura...El brillo del oro ciega y adormece las conciencias. como el aplauso y el fervor del público hacia el artista. Una vida de película entre algodones y bastidores. La fama llega a enaltecer hasta las más desmedidas ambiciones. Excelentes reflexiones fundamentales: la llegada a esa edad crítica para las actrices. La entrada en la madurez, que les cierra puertas. La paranoia que se siente ante la pérdida de la juventud, el temor a que jóvenes promesas lleguen arrasando para reemplazar a las viejas glorias. Y el modo en que es asumida esta etapa. Con miedo, con obcecación, con conformidad, con lucidez... La madurez puede llegar a ser gratificante si se acepta con dignidad.

 

La película nos presenta a una de las cínicas más encantadoras que ha dado el cine. El arranque se da la mano con el desenlace y entre medio Mankiewicz nos regala una magistral lección de cine. Los diálogos son la estrella de la película: inteligentes, cínicos, sarcásticos y puntillosos. El guión ostenta la solidez de las grandes obras y todos y cada uno de los interpretes destaca en su papel. Mención especial para George Sanders: galán, embaucador, vividor y sarcástico crítico teatral. Notable obra que gira en torno a la gran Anne Baxter. Si en la vida te encuentras con una mujer como ésta y te dice que te quiere... no lo dudes amigo, la habrás caído muy hondo. Magnifica Bette, los ojos más maravillosos que ha dado el cine. Ofrece una lección de cómo actuar en el teatro para el cine. Toda su interpretación es un esfuerzo por decirnos que lo que hace es artificioso, casi falso, pero que la cámara lo podrá hacer, y lo hace, verdadero. Genial. Aparece Marilyn Monroe y deja entrever  lo magnifico que será su futuro. George Sanders, genial en su rol de crítico que está por encima del bien y del mal. Magníficos diálogos sobre la amistad, el teatro, el cine, las ansias de triunfo, los anhelos por la eterna juventud...Todo esto que estoy comentando, está ausente en el cine que se hace ahora.

Eva Harrington, en su papel de arribista que todo lo sacrifica por conseguir el éxito; sino desde el Margo Channig, la reina del teatro que ve como se le escapó su juventud y lucha por entrar con dignidad en la madurez. Sobre este tema son también, los diálogos. Me fascina una frase que Margo le dice a Eva, tras recoger su premio:

-"No te preocupes por el corazón, Eva. Siempre podrás poner ese trofeo en su lugar"-

Diálogos que rozan la perfección, actores de los que no hay... Todo unido al gran Mankiewicz, engancha desde el principio. Aunque la película cuenta las ansias de poder (o de interpretación) de Eva, se podría decir que la película realmente gira en torno a Margo Channing, una actriz en la cima de su carrera pero a la que los años empiezan a asustar; con un carácter muy fuerte e impredecible y que poco a poco ante nuestros ojos llega una eterna veneración.

La película se llevó 6 merecidos Oscar: mejor actor secundario, director, fotografía, guión, vestuario y sonido. Y los que se quedaron por el camino: dos a mejor actriz principal; Anne Baxter y Bette Davis, dos a mejor actriz secundaria; Celeste Holm y Thelma Ritter, dirección artística, montaje, música... Mejor Actriz y Premio Especial del Jurado en Cannes, Globo de Oro a Mankiewicz... Es una obra maestra y además mas que recomendable. Bette Davis y Anne Baxter en el ring con Mankiewicz como árbitro y una plétora de magníficos secundarios animando la función desde las gradas. En una época en que van desapareciendo los auténticos duelos interpretativos entre divas de carácter, resulta sorprendente ver a dos fieras de categoría dando rienda suelta en una sucesión de escenas perfectamente calibradas para subrayar las diferencias y similitudes entre dos personajes condenados a caminar en paralelo sin llegar a rozarse. Aquí Bette Davis todavía desprendía un mortífero atractivo: su cara, tan irregular con su perfil, nunca tuvo una belleza tan extraña como en "Eva al desnudo"; la belleza era quizás el último destello de un rostro que ya se iba amoldando a las facciones de muñeca enajenada que llegó a lucir la diva en "¿Qué fue de Baby Jane?". Con su Margo Channing en "Eva al desnudo", Bette estira al máximo todas las posibilidades del papel, una actriz de teatro madura. Film fundamental de Joseph L. Mankiewicz. sobre un relato de Mary Orr, y publicado en la revista “Cosmopolitan”. Se rodó en escenarios naturales de Manhattan, San Francisco y Connecticut y en los platós de la Fox Studios

 

En mi larga carrera como cinéfilo y amante del cine, hay muchos personajes de mujer que me han atrapado, vuelvo a revisar sus películas, y me quedo satisfecho de poder admirar esas obras maestras y a esas actrices inmortales todo el tiempo del mundo... Ellas son, entre muchas, Gloria Swanson en EL CREPÚSCULO DE LOS DIOSES, Marlene Dietrich en TESTIGO DE CARGO y Bette Davis en EVA AL DESNUDO. A eso le llamo yo tener amor por el cine y justamente a la última que me he referido, por ser un film que combina drama y sátira social, centrándose en descubrir toda la verdad sobre Eva. La narración se pone en boca de Karen, Margo y, sobre todo, en Addison. Los recuerdos y puntos de vista de cada uno de ellos se presentan a través de un hábil juego de 7 flashbacks, muy característico en el método de trabajo de Mankiewicz. El guión es incisivo, agudo, sutil y brillante. Incorpora punzantes diálogos, que los presenta bien construidos, condensados y desarrollados con fluidez y sentido del humor. Explora temas humanos como la ambición, el amor, la amistad, los celos, la hipocresía, el cinismo, la deslealtad, la infidelidad, la traición. Estudia los efectos que ejercen sobre las personas  y analiza con seriedad, no exentos de ironía, los mecanismos del éxito en el teatro, en el cine de Hollywood en el mundo y en la historia. Potencia la tensión mostrando la acción y la correspondiente reacción. Este recurso se hace particularmente patente en la secuencia de la entrega del premio Sarah Siddons o en la secuencia central del film y en la fiesta de cumpleaños de Bill, donde Margo estalla emocionalmente, presa de ira y celos. La interpretación de Bette es de otro mundo, de otra galaxia: intensa, realista, apasionada, convincente y memorable. Su papel tiene connotaciones autobiográficas, que dan mas profundidad y fuerza. Para ella el film supuso la recuperación del favor del público en un tiempo de transición y fatiga. Además constituye un homenaje al teatro y al cine. Si a todo esto le añado la música de Alfred Newman, aportando una partitura de 23 cortes originales, de melodías intimistas y una fanfarria dedicada al teatro.....y la fiesta de cumpleaños incorpora piezas melancólicas, reflejo del estado de ánimo de Margo, añadiendo dos composiciones: "Sueño de amor", de Liszt, y "Beau Soir", de Debussy.

 

 

Con sutileza, vertidos al celuloide, para mover al espectador a una opinión determinada de total admiración y en cargar las rasgos a golpes, por la fuerza, con enormes destellos de capacidad fabuladora:

 

-" Que me entierren de pie”... - dice Margo en una escena "-.

 

Que me entierren a mí de pie pero frente a una pantalla gigante donde se proyecte esta película, llevándome todas sus virtudes. Brillante film este de Mankiewicz, sobre las ansias de triunfo. De hecho, como una hoguera de vanidades... poco a poco se desnuda TODO SOBRE EVA. Con una brillante estructura narrativa el cineasta nos cuenta una historia llena de resentimiento, como él vivió posteriormente en los circuitos de Broadway, transformando algunas criticas en auténticos panfletos de pura envidia profesional.

 

Homenaje pues de Mankiewicz al mundo de Moliere, narrado de manera única... Digna de ser considerada como una de las mejores y más renombradas cintas de la Historia del Cine. 

 

Ante una película con tan  positivas criticas,  poco más se puede decir, también se le ha criticado injustamente al film de no exponer el cambio de Eva de ratoncillo a depredador, ya que éste parece surgir de repente. Digo injustamente porque no hay cambio alguno en ella, desde el principio es la cazadora, tiene clara la estrategia a seguir, con una inteligencia y tenacidad exorbitadas. Esta errónea percepción se da porque se comporta de forma harto velada hasta un punto en que ya no necesita de su camuflaje y puede permitirse el ataque directo a la yugular, pero si nos fijamos en sus acciones veremos que se muestra manipuladora nata desde el primer momento. Sabe exactamente qué decir para ir dando pena a la vez que resultar útil mientras se va apropiando de las técnicas de los demás en su favor. Pocas veces se da en un film  con una conjunción de maestría, por la sabia dirección de Mankiewicz  Es ante todo una película sobre el teatro y las personas relacionadas con él. Sobre las relaciones de las mujeres con sus hombres, una declaración a favor de la sabiduría ganada en años. Magistral en los planos. El más artístico es el primero, que capta cada reacción, gesto, de los actores Y planos contrapicados para momentos dramáticos especiales, para mostrar superioridad. Se usa el travelling y el truco de efecto del escenario móvil para inducir el movimiento. Fotografía detallada y explicita, a los personajes los mantiene en escena cuando hacen falta o actúan sin palabras, el ritmo es adecuado, calmado, no quiere abrumar al espectador con demasiada información, teniendo esta característica de la escuela del viejo Hollywood. El mejor personaje femenino es el de Margo , la madura actriz que se siente insegura y poco querida ante la presencia de la joven actriz Eva. Muy orgullosa, irascible, pero con sentimientos, aunque no los muestre a menudo. Teme no ser mujer y actriz a la vez, de ser una “voz en un cuerpo”, de que su personaje de los escenarios acabe devorándola. Ante todo quiere saber quien es ella. Aparte, su temperamento y poderío, su mirada indescriptible, hacen de ella una presencia imposible de ignorar. Para mi el mejor personaje masculino es el de Addison, el crítico de teatro malicioso, manipulador e insensible, con gran agudeza, y experto en actos taimados. Su nombre es nombrado con poco gusto y su palabra es temida. Único, frío, conocedor del poder de su pluma y de su voz. No tolera ni permita que nadie le engañe o se ría de él. Gran presencia, infunde respeto; tiene un modo de hablar, profunda, grave y lenta, reconocible. De expresión dura.



En mi opinión le falta naturalidad a Anne Baxter, o quizás sea un elemento que la actriz utiliza para mostrar al público la falsedad de Eva,  interpretando el papel de mosquita muerta para ganarse la confianza de todos. De todas formas, aunque sí es verdad que su interpretación choca un poco con la de los demás, creo que no rompe con la película y como he dicho potencia el efecto dramático...pero añoro la Anne Baxter de LOS DIEZ MANDAMIENTOS. En cuanto al final, creo que a mucha gente le pueda parecer forzado, explícito y que les hubiera gustado un final más sutil. Pero el que se rodó a mí me parece magnífico ya que en vez de verle el componente de moraleja, yo lo interpreté y así lo viví, como la venganza de todos contra Eva. Creo que de ahí su duración, para que el espectador esté un buen rato regodeándose en lo mal que lo va a pasar Eva en el futuro y se quede con la satisfacción de que Eva ha triunfado mediante malas artes, pero va a beberse su propia medicina. Un poco para hacernos creer que hay justicia en el mundo... El film lo tiene todo. No en vano recibió catorce nominaciones para los premios Oscar, de los que al final consiguió sólo seis. Sólo una puntualización que me parece una injusticia para pasar a la historia, Bette Davis, que en justicia debería haberlo conseguido..

 

“EVA AL DESNUDO” es un filme en el que no se puede perder ni un sólo diálogo, pues hay brillo y exquisitez en cada una de sus palabras y precisión de movimiento de sus sólidos personajes. Esto es cine con mayúsculas que enaltece al arte y pone a la vida ante un espejo. La dirección de Mankiewicz es casi tan grande como su magnífico guión: diálogos ingeniosos, sarcásticos, alusiones a Hollywood, juegos de palabras. La manera de acercarnos al backstage de las gentes del teatro, una estrella, su ayudante, un director, un escritor, un productor y un crítico....Una película que, bajo ningún concepto, hay que perderse. Cuenta el biógrafo de Darryl Zanuck, George Custen, que la primera opción para el papel de Margo fué Marlene Dietrich, pero Mankiewicz se negó en redondo. También se barajó el nombre de Barbara Stanwyck y, más en firme, Claudette Colbert, pero ésta se rompió un disco de la columna vertebral durante el rodaje de la película que estaba finalizando, en una escena en que forcejea con un funcionario de prisiones que intenta violarla. Así pues, el papel fue ofrecido a Gertrude Lawrence, estrella de las comedias musicales, pero ésta exigió que la escena en que Margo aparece borracha fuera eliminada o modificada. Finalmente, el papel fue, gracias a los dioses, para Bette Davis:

La actriz le dijo a Mankiewicz:

-"El guión es un sueño hecho realidad"-.
 

En mi opinión, y comentado a lo largo de mi articulo cientos de veces y ahora en términos objetivos en cuanto a argumento, interpretación y guión, EVA AL DESNUDO, es la mejor película de la historia del cine. Siendo un film denso, que exige además de gran concentración, tiene la virtud de mantener el interés del espectador....Es excelente la presentación en off, pero lo que realmente me ha parecido magistral ha sido el final, cuyo mensaje se palpa en la historia circular magistralmente descrita en una imagen que quedará para siempre en mi memoria como la guinda del pastel que sitúa a esta película en la cumbre no sólo de la interpretación sino del cine como clásico inolvidable.